Proseguimos nuestro viaje desde Trieste y atravesamos la frontera con nuestra autocaravana y descubrimos dos preciosos pueblos costeros: Piran e İzola (Eslovenia). Nada más pasar la frontera recibimos la grata sorpresa de observar un cambio sustancial en los precios que se ofertaban en los distintos bares y tiendas. Pasamos de ver el botellín de cerveza de 4€ a 1€ y empezamos a salivar. El cambio de país olía a triunfo.Nos salió un día soleado y decidimos sacar las bicicletas para visitar ambos pueblos, ya que el acceso en coche era bastante complicado además.
PIRAN: El pueblo más bonito de Eslovenia
El pueblo de Piran en Eslovenia es absolutamente imprescindible de visitar porque tiene una belleza increíble. En una mañana te lo podrás ver de arriba a abajo y, si viajas en temporada baja, podrás tener el pueblo entero para ti sólo. Lo más importante que has de saber es que no se puede acceder en coche. Hay un parking, pero es enano y sólamente para vehículos autorizados. Lo mejor es que aparques en el pueblo más cercano y te acerques en bicicleta. Otra opción es hacer autostop o coger un autobús para llegar.

Nosotros fuimos en bibicleta viendo el amanecer conforme llegábamos al pueblo. La marea había estado alta durante la noche e iba bajando a la llegada de la mañana, por lo que el agua hacía unos efectos ópticos con el reflejo de los edificios y el sol. Si nos colocábamos donde los muelles que se adentraban al mar, parecía que estábamos flotando en bicicleta sobre el mar.

Tartini Square
La plaza de Tartini es el centro de Piran y destaca por sus dimensiones y majestuosidad. En su centro se encuentra el monumento esculpido en el 1896 del violinista Tartini a quien hace homenaje. Tiene un estilo puramente veneciano y se sitúa junto al puerto, lugar donde se amarraban los barcos para el comercio, ya que la plaza se encuentra fuera de la fortificación.

Ancient Square
En pleno centro histórico de Piran se encuentra una plaza veneciana que tiene la mayor antiguedad. Es pequeña y angosta, a diferencia de la plaza Tartini que es abierta. Sin embargo, tiene un encanto especial y es menos turística, por lo que encontrarás lugares más baratos y con encanto para comer por ahí o tomarte una bebida fría en una terraza.

Iglesia de San Jorge
La Iglesia de San Jorge se ubica en lo alto de una colina de Piran con un estilo arquitectónico veneciano, obra de Bonfante Torre, siglo XII. Tiene una torre con un reloj muy característico y desde su altura, puedes observar la parorámica del pueblo de Piran con sus tejados entrañables.

Las murallas de Piran, Eslovenia
La parte más antigua de la ciudad de Piran en Eslovenia se sitúa hacia lo alto, así que te cansarás de subir escaleras interminables. Tiene una muralla construida en el siglo VII que la rodea y, por su parte norte, acaba totalmente al ras con el mar, donde hay un lindo camino con bancos para observar el horizonte. Es una zona ideal para pasear en pareja y disfrutar de la brisa y la tranquilidad.

¿Dónde comer en Piran, Eslovenia?
Fritolin Pri Cantini
Encontrarás numerosos restaurantes para comer pescado a la barbacoa, pero nosotros recomendamos éste. Se encuentra en pleno centro histórico y los precios son más asequibles que en otros lugares que están a pie de mar. Abren de 11:00 a 23:00, por lo que sirven tanto comidas, como cenas. Encontrarás comida mediterránea y buenos mariscos.
Dirección: Prvomajski trg 6, Piran 6330, Eslovenia
Si quieres saber más sobre los 10 mejores restaurantes de Piran, pincha AQUÍ.
IZOLA: Pueblo pesquero de Eslovenia

Izola es un pueblo esloveno situado en la costa, a pocos kilómetros de Piran. Actualmente se ha convertido en una zona de atractivo turístico por ser una pequeña villa muy tranquila marinera con mucho encanto. A día de hoy, todavía no está muy masificada.
También destaca por su gastronomía del mar y podrás encontrar en todos los restaurantes a pie de mar, grandes recetas culinarias donde el pescado es el elemento predominante. Puedes pasear por el Casco Antiguo de Izola lleno de encanto y tradición, con sus calles estrechas que llevan a otras callejuelas con restaurantes de gran tradición. También podrás encontrar el Templo de San Mauro donde se encuentran numerosas obras de arte y reliquias, y el Balneario de San Simón.
Si subes sus colinas, podrás encontrar campos y campos de frutales, viñedos y olivos donde hay numerosos puestos callejeros que venden sus productos a precios muy asequibles. Podrás hacer pequeñas excursiones tranquilas paseando por el campo. Los festivales más importantes de Izola son: La fiesta de los pescadores, la fiesta del vino, la fiesta del olivo y la fiesta del pescado. Así que en resumidas cuentas, Izola es una ciudad hecha para la gastronomía y la tranquilidad.

Si quieres continuar bordeando la costa mediterránea tras ver Piran e Izola en Eslovenia, y te diriges hacia Italia porque llevas idea de ver Venecia, no has de perderte Trieste. Se encuentra junto al mar nada más pasar la frontera y es uno de los lugares con más encanto. Pincha AQUÍ para conocer más.